Este babero es de silicona alimentaria, un material eco-friendly muy resistente.
Además, es muy fácil de limpiar y tiene un tacto suave.
Perfecto para proteger la ropita de tu peque mientras aprende a comer solito. Si ya os habéis lanzado al método BLW… ¡seguro que se convertirá en vuestro imprescindible!